paseando por ahi (luna)

estaba ahi como si nada tratando de pensar en el porque era asi porque era tan magnifico y sorprendente y necesitaba hablar con alguien para librar mis penas pero el problema es que no sabia con quien

Estaba paseando descalza por la arena, intentando olvidar todo lo que había ocurrido en esos últimos días con la pérdida de Luc y del bebé ¿por qué?
Divisé a un chico a lo lejos y al escuchar su mente decidí acercarme ya que parecía estar algo confuso

Sonreí y le ofrecí mi mano a modo de presentación.
-Luna ¿y tu?-pregunté esperando a que aceptara mi mano y la estrechase entre la suya

Asentí con una sonrisa y volví a soltar su mano con delicadeza.
-Necesitaba pensar pero tu necesitas hablar-dije ya que sabía eso debido a mi poder, el cual acababa de dejar al descubierto

Me encogí de hombros y fui hacia una roca cercana a sentarme en esta.
-Bueno, ¿qué quieres saber de mí?-pregunté divertida por la situación

Reí divertida y le hice un gesto con las manos para que no preguntara tantas cosas seguidas.
-Soltera de 16 años, vampira,cumplo el 15 de marzo y mi color favorito es el amarillo-respondí con sinceridad-¿y tu?

No pude evitar reír de nuevo con su último comentario pero asentí, quería que se desahogara de sus confusiones.
-A ver, que te ocurre

Me enterneció su explicación y acaricié su rostro con ternura, como si fuera mi hermano.
-Es normal, yo tardé en controlar los míos pero pronto verás como es genial ser quien eres

me ha gustao que me acaricie y pronto lo sabra porque sabe lo que pienso pero bueno es normal que se sienta asi ¿y tu cuanto tardaste en acoplarte a ellos?

Me quedé pensativa pues no sabía exactamente...
-Los tengo desde que nací y sobre los 12 empecé a saber controlarlos pero hasta hace unos meses no lo logré del todo

-Puedo manipular tu mente si el lo que quieres ¿o piensas el otra forma?-pregunté lanzando una piedra al agua, la cual dio dos botes antes de hundirse

Lo vi recostarse y sonreí, haciendo lo mismo y apoyando mi cabeza en su pecho, escuchando su corazón.
-Cierra los ojos y despeja la mente-susurré cerrando los míos y adentrándome en su cabeza, despejándola

hago lo que me dice mi ment en total blanco aunque me hacia cosquillas con el cabello

-¿Mejor?-pregunté aún sin abrir mis ojos y con una divertida sonrisa en mis labios

Sonreí agradecida por su comentario y levanté la cabeza mirándolo reír.
-Lo siento, ya no te hago cosquillas-dije riendo divertida