Encuentros (Mirabella)

Haber, haber... ¿que podía hacer con él?
Dejarlo en pelotas... emmm... demasiado fácil
Hacerle pegarse a si mismo... emm... muy visto.

- Hazme reir, pequeño Luca - le dije acercandome y pasandole la mano por la mejilla, todo excesivamente lento. Y que no se quejara que le estaba dando una lección rápida de como manejar el poder de la seducción.

Al ver que me intentaba poner las manos encima di un par de pasos hacia atrás

- Quieto - dije, ¿porqué había desobedecido mi orden e intentado realizar otra distinta? A menos que....

¡El muy gracioso me estaba intentado hacer cosquillas!

Empecé a reirme como una loca...

Me acerqué a él - vale, cuando diga ya podrás hacer lo que quieras, - le di un beso en la mejilla, para que luego no se enfadase mucho, la verdad empezaba a caerme bastante bien, y necesitaba que alguien me enseñase la ciudad...
Le mire una vez más antes de hablar, suspiré...
- Ya

Rei divertida ante su petición... - seguro que ya puedes hacerlo, pero no pienso dejarte probar conmigo - volvi a reir un poco.

- Sólo tienes que desear manipular a alguien, desearlo con fuerza, sentirlo - dije con pasión, me encantaba mi poder - y saldrá sólo, claro que al principio tu manipulación durará poco y será más bien débil..

Volvía a tener a Luca demasiado cerca, aunque no me incomodaba, era extraño. Su pregunta me dejó desorientada unos segundos, como me había reconocido, la verdad, no es que fuese muy fácil encontrarse a un híbrido por casualidad, no eramos muchos...

- Pues... si - volvi a recuperar mi posición dominante - ¿Y tú? ¿También?

La verdad no era una pregunta muy desacertada ya que podía haber reconocido en el partes de vampiro pero además tenía algo extraño, él también.

Me reí dulcemente mirandole a los ojos "¿si supieses lo rarita que soy yo? te sorprenderías"

- Bueno si te sirve de consuelo, yo además de ser rarita soy muy muy vieja - le dije haciendome la triste como si la edad me importase lo más mínimo.

"Si tu supieras el año en el que nací..."

- Sí, yo la verdad es que dejo a mi otro yo en off, la mayoría de las veces, en mí hay uno que pesa más que el otro, es extraño - dije seriamente y al escuchar el tono en el que lo había dicho, como de reflexión personal, solté una risa dulce para suavizarlo.

Sonreí, yo odiaba que mi parte buena me hciese ser vulnerable, "buena", aghh.. ahora mismo, actuando completamente como un vampiro, esa parte de mi me daba asco.

- A veces odio ser lo que soy... - dije cerrando los ojos y relajandome completamente, por lo que de repente ejerci una atracción total sobre todo lo que me rodeaba, al no "sujetar mi don" al estar demasiado relajada.

- Claro, enseñame esta maldita ciudad, además - dije todavía relajada y con una sonrisa traviesa en la boca - empiezo a tener hambre...

Abrí los ojos y me dejé llevar por él - ¿dónde me llevas? - pregunté con tono de (tú lo que quieres es hacerme cosas "malas") y después solte una carcajada - ¿no será esto lo que me quieres enseñar no, berry? ¿qué me vas a enseñar árboles?

Berry? Acabo de morir..

lo sé!! pero contesta tolay!!

Me dejé llevar, sonriendo divertida y pensando que mis ojos ya debían haber cambiado de color, se habrían tornado de un rojo suave, ya que el hambre estaba haciendo mella en mi.